Un cuarto propio reclamaba Virginia, un tiempo un espacio propio. Un mundo privado, de sensaciones que a su vez encierran otros mundos. Recuerdos, creatividad, placeres y futuros inciertos, todo sucede a su tiempo. Y es ahí donde nacen y disfrutan ciertas canciones, como las de Agustina Bécares. Una cantautora de Mendoza que se mueve en delicadas melodías que encierran historias de una posible intimidad que nos llega de alguna forma a todos. Desde una perspectiva folk-rock personal, se abre a exquisitos arreglos en composiciones elementales generando cálidos climas de los cuales escapar no tiene sentido, todo envuelto en su particular registro de voz. El año pasado edito el ep "Torpe" producido por Andrés Ceccarelli, mas que recomendable...mientras la escucho, en mi cuarto propio, contemplo por la ventana un florecido jardín de Verano y el cuadro cierra ahí.
que lindo
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